Los sitios que ya no están: otro tipo de fantasmas
Me obsesiona cuando me entero de que un sitio que fue importante en mi vida ya no existe. Parece algo trivial, pero si lo pensamos, es una noción fuerte. ¿Cuándo es la "última vez" que pisamos un lugar muy querido? Casi nunca lo sabemos, y cuando miramos hacia atrás en el tiempo decimos "pensar que ése fue el último día que estuve ahí". Estoy segura de que mis abuelos lo supieron. Cuando dijeron adiós en su pueblo de Polonia, a la madre temblorosa y al padre que se sacudía la tierra de las manos para darle un abrazo y desearle que en la América tuvieran una vida mejor que la que ellos podían brindarle ahí, estoy segura de que mientras el carro tirado por caballos se alejaba, con ellos sentados incómodamente sobre la madera opaca y manchada de lluvias, nevadas y soles interminables, junto al baúl con todas sus pertenencias, seguro que miraron hacia atrás hasta que las casitas dejaron de verse, hasta que los últimos árboles lejanos del bosque donde solían esconderse ...